La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, es una de los muchos líderes europeos y mundiales que han condenado enérgicamente el ataque con misiles perpetrado por Irán el lunes por la noche contra Israel, un ataque que amenaza con desestabilizar Oriente Próximo y sumir a la región en una guerra total.

«Insto a todas las partes a que protejan la vida de los civiles inocentes«, declaró Von der Leyen en un comunicado difundido el martes. «La Unión Europea sigue pidiendo un alto el fuego en la frontera con Líbano y en Gaza, y la liberación de todos los rehenes retenidos desde hace casi un año».

El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que su Administración «apoya plenamente» a Israel y que está discutiendo con sus asesores cuál debería ser la respuesta adecuada. Sin embargo, descartó el apoyo estadounidense a un ataque israelí contra lugares relacionados con el programa nuclear de Teherán.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, prometió tomar represalias después de que Teherán disparara unos 180 misiles balísticos contra Israel durante la noche, declarando en un vídeo publicado en la red social X que «Irán ha cometido un gran error esta noche, y pagará por ello».

El ataque de Irán se produce tras el bombardeo del Ejército israelí sobre el Líbano, en el que mató a numerosos altos cargos del grupo militante Hezbolá, respaldado por Irán. Hezbolá ha disparado cohetes casi a diario contra Israel desde el inicio de la guerra en Gaza, el 7 de octubre de 2023.

Más de 41.000 palestinos han muerto en Gaza

Desde entonces, más de 41.000 palestinos han muerto en la Franja de Gaza debido a las incursiones aéreas y terrestres israelíes, y algo más de la mitad de los fallecidos son mujeres y niños, según las autoridades sanitarias locales.

El jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borell, declaró que el bombardeo continuo de ataques «ojo por ojo» corre el riesgo de alimentar una escalada regional incontrolable. «Pedimos a todas las partes que actúen con la máxima moderación«, declaró en un comunicado. El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, afirmó que la UE «está dispuesta» a apoyar los esfuerzos para rebajar la tensión, y que una guerra regional «no interesa a nadie«.

El primer ministro británico, Keir Starmer, condenó el intento iraní de dañar a israelíes inocentes y advirtió de que el incidente amenaza con «empujar a la región cada vez más cerca del borde» de la guerra. «No puede tolerarse», añadió Starmer.

El canciller alemán, Olaf Scholz, se hizo eco de esta retórica, afirmando que el ataque debía ser «condenado enérgicamente» y que el sistema aéreo de defensa israelí, la Cúpula de Hierro, evitó un resultado mucho peor.

El presidente español, Pedro Sánchez, también condenó el ataque y pidió que «se ponga fin ya a la espiral de violencia». Sánchez, cuyo Gobierno reconoció recientemente la condición de Estado de Palestina, afirmó que se puede garantizar una paz duradera en la región una vez que se logre un alto el fuego entre Israel y Hamás e Israel y Hezbolá.