más de 50 muertos, por la Violencia en frontera Sudán-Sudán del Sur

- Entre ellos cascos azules de la ONU
- Los lugareños se reúnen en un campamento de fuerzas de paz de la ONU luego de ataques mortales, en Dokura, una zona fronteriza entre Sudán y Sudán del Sur.
Sudán, Al menos 52 civiles y dos miembros de las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU perdieron la vida durante intensos enfrentamientos que se desataron el sábado en la estratégica región petrolera de Abyei, objeto de disputa entre Sudán y Sudán del Sur. Los violentos disturbios se desencadenaron tras un ataque armado perpetrado por miembros de una tribu contra un clan rival en la zona.
Los lugareños se reúnen en un campamento de fuerzas de paz de la ONU luego de ataques mortales, en Dokura, región de Abyei , zona fronteriza entre Sudán y Sudán del Sur, en esta imagen fija obtenida de un video de redes sociales publicado el 28 de enero de 2024. © Reuters
Los enfrentamientos en Abyei, un disputado territorio rico en petróleo a ambos lados de la frontera, estallaron el fin de semana, según las autoridades locales.
La Fuerza Provisional de Seguridad de las Naciones Unidas para Abyei (Unisfa) aseguró que “condena enérgicamente estos ataques contra civiles y fuerzas de paz”. “Actualmente, según las autoridades locales, 52 civiles han perdido la vida, mientras que otros 64 están gravemente heridos”, añadió.
El organismo dijo que las fuerzas de paz fueron atacadas el domingo “mientras transportaban a civiles afectados desde una base de Unisfa a un hospital”.
Un casco azul paquistaní murió y “cuatro uniformados y un civil local resultaron heridos”, añadieron. Otro militar ghanés fue asesinado el sábado, añadió Unisfa, que pidió una investigación sobre la violencia.
Situada entre Sudán y Sudán del Sur, Abyei ha sido un punto álgido desde que el Sur obtuvo su independencia en 2011.
Según las autoridades de la zona administrativa especial de Abyei, jóvenes armados y una milicia rebelde local llevaron a cabo una serie de “ataques bárbaros coordinados” que comenzaron el sábado por la mañana.

- Más de 7 millones de desplazados, mientras las zonas seguras se reducen
Rou Manyiel Rou, secretario general del Área Administrativa Especial de Abyei, comentó el sábado que la violencia estaba ligada a un “conflicto de larga data entre las comunidades Ngok y Twic”.
En una declaración publicada este lunes, Reino Unido, Noruega y Estados Unidos, el grupo internacional que patrocinó la independencia de Sudán del Sur, señalaron estar “profundamente preocupados por la escalada de violencia en los últimos meses entre las comunidades que viven en Abyei y sus alrededores”.
En noviembre del año pasado se reportaron otros violentos enfrentamientos en los que murieron 32 personas, incluido un militar de la ONU.
Un enviado regional de la ONU expresó en ese momento su preocupación porque los combates dentro de Sudán se estaban acercando a la frontera del país con Sudán del Sur y Abyei.
Hanna Tetteh, enviada especial de la ONU para el Cuerno de África, aseguró que la proximidad de Abyei a los combates entre las fuerzas rivales de Sudán amenazaba con desestabilizar la ya frágil región y sus dinámicas locales muchas veces volátiles.
Dijo que la crisis de Sudán también había puesto “en suspenso” las conversaciones entre líderes de ambos países sobre el estatus de Abyei, largamente disputado.
La misión de paz de la ONU en Abyei, que lleva 12 años allí, actualmente cuenta con unos 4.000 militares y policías.
Las tensiones entre Sudán y Sudán del Sur encuentran su origen en diversos factores, entre ellos conflictos étnicos, disputas por recursos naturales y luchas por el control político. En el caso de Sudán, los enfrentamientos se han intensificado debido a una contienda interna por el poder entre las fuerzas armadas convencionales y una influyente fuerza paramilitar denominada Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), lo que ha desembocado en episodios de violencia y desplazamiento masivo de la población.
Por su parte, Sudán del Sur ha enfrentado conflictos internos desde su independencia en 2011, con luchas entre el gobierno y fuerzas rebeldes, agravadas por disputas por el petróleo y conflictos étnicos arraigados en décadas de guerra civil.
Con AFP